Que no se diga de las personas con discapacidad
que estamos muy cómodas
con las cosas que hacemos.
Que no se diga que estamos parados, y
que no queremos avanzar.
Que no se diga que nos escondemos, y
que detrás de lo que ves de nosotras
no hay más que ver,
pues tienes mucho que mirar
para darte cuenta de que nos movemos, y
de que no paramos de querer crecer.
Crecer como personas
que intentan vivir en igualdad de oportunidades, y
que se preparan para lograrlo.
Con la ayuda del banco CaixaBank y
de la Fundación de Caja Granada
nos preparamos
para que sea más fácil encontrar nuestro hueco y
poder trabajar como lo que somos:
personas capaces.